Prisión preventiva para el acusado de correr a 240 km/h por la 9 de Julio
El fiscal Gonzalo Viña logró acreditar que corría riesgo la investigación en caso de que Alejandro Radetic quedara en libertad.
Entre las 10 y las 15 del domingo se realizó la audiencia en la que el fiscal porteño Gonzalo Viña logró que el juez Pablo Casas decrete la prisión preventiva para Alejandro Radetic, el conductor que se grabó conduciendo a más de 200 km/h por la avenida 9 de Julio y otras grandes arterias de la ciudad Buenos Aires.
En la casa de Radetic la policía encontró un importante arsenal, que incluía armas largas, cortas y municiones, que sin embargo no fueron incautadas porque contaban con los papeles en regla, según publicó Infobae.
El juez Casas, a cargo del Juzgado en lo Penal, Contravencional y de Faltas N° 10, hizo lugar al pedido de la Fiscalía y dispuso que Radetic, de 36 años, espere preso el juicio por conducción riesgosa en concurso real con daños, lo que podría llevarlo a la cárcel durante un período de entre 6 meses y 7 años, además de la inhabilitación para conducir durante el doble de tiempo de la pena.
Según explicó la Fiscalía, estando en libertad Radetic podría entorpecer la investigación, que continúa y se enfoca también en el otro conductor, que ha sido individualizado pero que aún no ha sido apresado.
A partir de ahora, el fiscal Viña tendrá tres meses para continuar con la instrucción de la causa, recabando pruebas, y deberá elevarla a juicio el 6 de agosto próximo a más tardar.
El excéntrico empresario -que se autodefine como piloto de autos, cantante de reggetón, "fiestero" y "fierrero"- tiene 36 años, y si bien llegó a la primera plana de los medios en los últimos días, su popularidad en las redes sociales no es nueva: en Instagram, tiene unos 65 mil seguidores, con quienes comparte ostentosas fotografías rodeado de lujo, mujeres, armas, automóviles y motos.
Ayer, Radetic fue apresado en su casa del barrio Cabos del Lago, en Nordelta, por efectivos de la Comisaría 4º de Benavidez. Luego, fue trasladado a la fiscalía, donde se negó a declarar.
Durante toda la jornada, el joven empresario -director de la empresa constructora contratista del Estado Marcalba SA- se mostró sonriente cada vez que fue abordado por fotógrafos y periodistas. Incluso, no perdió la oportunidad de exhibirse sus manos esposadas con los pulgares hacia arriba.
El imputado quedó detenido en dependencias del Servicio Penitenciario. Y deberá responder por el delito de conducción riesgosa, previsto por el artículo 193 bis del Código Penal, en concurso real con daño agravado (artículo 184, inciso 5) y podría recibir una pena que va de los seis meses a los siete años de prisión e inhabilitación para conducir por el doble de tiempo de la pena.
Mientras tanto, las autoridades de las áreas de tránsito y seguridad del Gobierno porteño consultadas por Infobae admitieron que se notificaron de los hechos por los medios, y que durante todo el recorrido en el que se llevó a cabo la picada no tuvieron denuncias ni alertas de seguridad.